domingo, 22 de noviembre de 2009

Estado de Caos Permanente en el Centro Cultural Islas Malvinas.-


Con la clara premisa de "desconectarse para soñar y conectarse para actuar", más de una docena de colectivos artísticos audiovisuales y musicales se dieron cita en el espacio cultural platense para mostrar su condición rebelde en un festival nutrido de DJ sets, recitales, proyecciones y un concepto cyber-punk.

Por Guillermina Watkins
Fotografía gentileza de Daniela Silva

La Plata, noviembre 16 (Agencia NAN-2009).- Hijos del rigor, los platenses siempre arrancan tarde. El sábado pasado, por ejemplo, ante un sol que no llegaba a amedrentar la espera de dos horas con la que comenzó el festival Estado de Caos Permanente, que reunió expresiones artísticas locales y porteñas que utilizan medios digitales en su producción o en la puesta de escena. Como un relato de Orwell, Dick o Bradbury, esta vez el festival de nuevas tecnologías aplicadas al arte conceptual se basó en una idea futurista: la de la la sublevación de los artistas rebeldes frente al sistema de Control Central, partido unipersonal que mantiene anestesiada a la sociedad en 2040.

Con esa idea, el espacio del Islas Malvinas se dividió en tres durante la primera jornada. En el patio central se ubicaron los DJs Ale Gamba, Clan DJs y Finger Vodoo, que sacudió las bateas hasta bien entrada la noche del sábado. En dos cuartos aledaños se intentaba desarrollar la rebeldía musical: RodyTodd, con proyecciones a cargo de Los Amigos de la Imagen, fue calentando el sector ciber-punk para dejarle lugar, más tarde, al hip hop de I Need to Take my Medicine, que hizo bailar a más de uno. Mientras tanto, en el cuarto de reflexión, los grupos multimedia Dragg and Dropp, Amigos de la Imagen, Sarna y Watio convidaban a la gente sus instalaciones multimedia en 3D, con capturas de movimiento en tiempo real.

Minutos más tarde, y en un clima de absoluta intimidad, se subió a los escenarios centrales Electrochongo, el artista porteño (anteriormente conocido como Capitán FOK) que siempre es bien recibido en La Plata y que deleitó con sus canciones pop al público que casi colmaba el patio del Malvinas. El cierre estuvo a cargo de Chico Ninguno que  coronó su noche a las dos y media de la mañana.

Al otro día, con una concurrencia más variada, a las seis de la tarde comenzó la segunda jornada de Estado de Caos Permanente, la más cumplidora de las dos. Con un DJ set más variado, el patio central recibió esta vez a artistas platenses como Le Villera, Juan Romero y la visita de Maga Lee, una DJ porteña que viene pinchando hace varios años drum & bass por las noches. Con algunos problemas técnicos, logró ser la primera en obligar al movimiento con sus ritmos rotos, entrecortados o circulares.

En la pieza performática todo continuó igual que el día anterior, permitiendo un espacio de interacción con el público y su acercamiento a las nuevas tecnologías. Mientras que en la pieza cyber–punk, aún con una Maga Lee que esperaba que los imprevistos técnicos se solucionaran, la “familia” platense se fue acodando entre las luces de colores y las proyecciones de Amigos de la Imagen para ver a Umagrama, banda electro-pop de la ciudad que ya cuenta con varias presentaciones y un público amplio.

Más tarde y en el mismo escenario, Maricas Malas Programadas Para El Mal --un dúo trasvestido-- deleitó a sus seguidores con sus canciones maricas y hasta Juan Cruz (la marica más mala) simuló parir en vivo. La clave bizarra de la noche terminó cuando Reanimator subió a tocar y fue calentando al público que esperaba a que Charlie Jackets coronara la noche con su electro-punk.

Y llegó nomás el momento en que todo el caos vespertino pareció acomodarse, para llevar adelante una de las premisas por la que esos artistas rebeldes se habían reunido: "Desconectarse para soñar y conectarse para actuar". Lo que se materializó en el momento en el que las bases electrónicas de Charlie Jackets comenzaron a sonar, y sus cuatro integrantes brindaron un show cautivador con sus clásicos de siempre --que cuenta con versiones de Los Brujos, Nirvana y Flema-- y un gran show performático por parte de sus integrantes, que no dudan en rockearla ni un minuto.

En un show de un poco menos de una hora, el descontrol del artista rebelde que vive en estado permanente de caos quedó demostrado con el cierre de los Jackets. Como también quedó en evidencia que gracias a ellos y a todos los artistas que se presentaron, la electrónica de los rebeldes tiene sabor a rock.

lunes, 16 de noviembre de 2009

Cabe Mallo: "aún conservo una actitud de vida muy punk"



En una entrevista que terminó convirtiéndose en una charla casi íntima, Agencia NAN tuvo la oportunidad de descubrir que, detrás del hombre conocido como "el padre" de los matchs de improvisación en La Plata, se esconde un artista full-time, un topógrafo de la vida cultural platense en los últimos 20 años.

Por Guillermina Watkins
Fotografía de The Dark Flack (www.thedarkflack.com)

La Plata, noviembre 13 (Agencia NAN-2009).- Dicen que el buen perfume viene en envase pequeño, pero también el veneno. En este caso, es la primera opción: nada de venenos, nada de malos sabores, simplemente mucho arte envasado en el metro sesenta y ocho que mide Roberto Mallo --para los platenses, "El Cabe"--. El reconocido "importador" de los matchs de improvisación a la ciudad de las diagonales deja caer de su boca frases certeras sobre la vida cultural de La Plata de finales de los 80s y principios de los 90s. Músico, actor, performer, docente, dibujante y también escritor, este hombre de 41 años sorprende con su vivacidad a quien tenga la oportunidad de conocerlo. Bienvenidos al mundo de uno de los personajes más populares y carismáticos del arte de la ciudad cuadrada.

--¿Cuándo comenzó tu relación con el arte?
--El otro día encontré una carpeta con un montón de dibujos de cuando era chico y me di cuenta de algo buenísimo: que en la actualidad dibujo con la misma teoría constructiva que a los siete. Supongo que la cuestión del teatro fue una cosa más rara, porque cuando uno es niño actúa todo el tiempo no hay cosa más teatral que un chico , pero después eso queda tapado en la adolescencia por cuestiones sociales. En la secundaria tuve como unos "destellos" teatrales cercanos al happening y organicé unas muestras horribles de arte, pero creo que canalicé por otros lados.

--¿Y ahí es cuando empezaste a hacer música?
--Sí. Terminé el secundario y me metí en la Facultad de Bellas Artes, me agarró como una especie de ataque renacentista. Ahí armamos Topografía Difusa con Federico Mutinelli (actual bajista de Mostruo!) y con Rudie Martínez (de Adicta). Era finales de los 80s y estábamos en la crisis alfonsinista de hiperinflación. Hubo un despertar dark y nosotros un poco encarnábamos eso: escuchábamos Eisutzende Neubaten, Cabaret Voltaire, Pere Ubú, íbamos a los programas de radio y los arruinábamos con esa música, les poníamos lo más inescuchable del darkismo. Con esa formación tocamos una sola vez en La Plata y otra en capital. Usábamos una caja que era como una computadora monofónica y no podíamos hacer muchas cosas; pero me encantaba, era todo muy punk aunque fuéramos promiscuos con la música.

El Cabe le muestra a Agencia NAN una joyita que ni Rudie tiene en su poder: una foto de la primera formación de Topografía Difusa. El tecladista de Adicta, alto, flaco y glamoroso, ya combinaba una bombacha de gaucho con unos lentes modernos como los que se usan en la actualidad; el Cabe, con lentes más beat y vestido de negro con camisa sin cuello --"pero no al estilo Mao". Fue tomada antes de la única presentación de la banda en la ciudad. "En ese show tocamos con dos amigos invitados, uno estaba en la trompeta y el otro era Manuel Moretti (Estelares), al que conocíamos de un bar al que íbamos todas las noches: El Taller. Ahí Manuel era mozo y recién empezaba con su primera banda, Licuados Corazones".

En ese show, Moretti, el compositor de "Ella dijo" y "Aire", aportó gritos, llantos y cantos entrecortados. El mismo día, Las Canoplas "una de mis bandas favoritas", cuenta Mallo tocaba en un concurso organizado por el sello RCA y el programa Submarino Amarillo, de Tom Luppo. Entre otras muchas efemérides, también ese mismo día moría Miguel Abuelo.

El principio de la inercia (el movimiento)

Cuando el Cabe pone su remix del tema de Topografía Difusa "Soroza desconoce el principio de la inercia", melodías o algo similar oscuras y densas (a lo "Silence is Sexy" de Neubaten) inundan el ambiente. Una mezcla de Suicide, de Alan Vegas, y de Ramones, pero con sonido local. "El tema se llama así porque Mutinelli tenía un amigo, Soroza, que un día lo llevó al ensayo en bicicleta y en una frenada brusca, Muti salió volando y se hizo mierda. Rudie comenzó a cantar esa canción mientras zapábamos encima, un lime punk. Y lo grabó Alfredo Calvelo que hacía sus primeras grabaciones con nosotros y ahora trabaja con la mayoría de los músicos de la ciudad, hasta con los que ya no viven acá, como Bochatón o Adicta.

--Fueron bastante modernos ustedes...
--Sí, la verdad que sí. Estábamos con un poco de delay respecto de las grandes ciudades, pero ahí nomás, por poquito. Hacíamos un cover de la primera banda punk que hubo en la ciudad, Los Baraja, que era como el "Anarchy in the UK" platense y se llamaba "La Plata se congela". Decía: "La Plata se congela de aburrida hoy / hoy como todos los días / en el cine la película de yanquees cortada / y en el centro que te hablan de la última pavada / qué semana de mierda y las chicas me miran la cara / porque no tengo una moto ni me gusta ir a bailar / escupiré sobre la cara de los dueños de la estupidez". ¡PUNK!

Luego surgieron proyectos distintos, pero con los mismos integrantes. Mallo y Martínez crearon Fríos Circuitos Primarios, pero no llegaron a tocar. Luego, una suerte de Topografía Difusa 2.0, que se fue poniendo "más funk y dub", según el Cabe. "Queríamos hacer una mezcla entre Ramones y Robert Fripp, algo impensable, pero así fue como se fue haciendo más extrema la experiencia de Topografía, más teatral, con más danza. Y con los meses nos fuimos distanciando, los hermanos Mutinelli armaron Los Peregrinos con Moretti y yo me quedé con mis cosas. Topografía decantó en Estelares, Adicta, Mostruo! y, en cualquier momento, en el Cabe Mallo... ¡solista!

Los sonidos del teatro

--Pero te fuiste más hacia el teatro que hacia la música...
--Si bien siempre hice las dos cosas, porque cuando cantaba estaba con un grupo de teatro que se llamaba Disisisissss y que este año cumplió dos décadas, nunca dejé la música y ella nunca dejó de estar separada del teatro en mí. Con los Disisisiss también éramos muy punks, teníamos una estética bien pop, con calzas y camisas de colores. Ahí trabajé por primera vez con un compañero de la secundaria, el "Masso" Fernando Massobrio , con el que actualmente seguimos en el espectáculo de improvisación Altibajo impro. En esa época, Topografía había desaparecido y se había armado Contentos Con Poco, donde tuve algunas participaciones.

--Y, en escena, ¿cómo seguían ligados la música y el teatro?
--Nuestra primer obra con Disisissss estaba compuesta por nueve temas de The Residents y la presentamos a dos meses de haber comenzado a estudiar teatro. Ahí me di cuenta que quería estudiar más y conocer más, entonces empecé a ir a capital, al Parakultural, a Cemento, comencé a ir a jugar a los match de improvisación. Esos mundos se mezclaron. Lo hice durante diez años, hasta que me cansé y los empezamos a hacer acá. Primero con ese mismo grupo porteño y después con gente de La Plata que se iba sumando.


El Cabe sigue pateando las calles platenses con "108 millones de ideas". Si bien este año no dio clases de teatro porque "después del cierre de la sala teatral La Fabriquera no se pudo buscar otro lugar", sigue mostrando varias de las obras de las que forma parte: Mar de fondo, que narra un segmento de la vida del almirante Brown y otra sobre la misma figura histórica, Altibajo Impro" junto a su colega de toda la vida Massobrio. Y prepara un espectáculo nuevo para estrenar durante la próxima Muestra Ambulante V, organizada por el Galpón de La Grieta, a finales de este mes.

Como si eso fuera poco, continúa dando clases en Bellas Artes y en el Colegio Nacional de La Plata y, mientras dibuja por las calles de la ciudad y prepara un libro de edición casera con su producción cuentística, imagina una obra de improvisación que mezcle el melodrama con lo musical y la estética del videoclip, "algo bien limado", que presentará en 2010. Sin dejar de ser un reservorio de anécdotas, el Cabe apareció en la galería de imágenes que se mostró en el Centro Cultural Malvinas para homenajear a Mr. América, una de las bandas emblema de la ciudad (con la que cantó en un show en los 90s) y se animó a hacer un remix de Chico Ninguno a quien conoció a través de Facebook , que saldrá en el "lado C" del disco de ese otro artista inquieto de la ciudad.

lunes, 9 de noviembre de 2009

Suda Mery K!: la historieta latinoamericana.-




Desde Argentina, Chile y Bolivia, tres historietistas llevan adelante la publicación Suda Mery K! para romper con “una generación moldeada a los gustos de Estados Unidos y una tradición Latinoamericana coartada”, resumió a Agencia NAN el franco-argentino director de la publicación en el país, Thomas Dassance, que ya lleva más de diez años viviendo en La Plata y trabajando para promover el arte de la viñeta.

Por Guillermina Watkins
Imagen gentileza de Suda Mery K!

Buenos Aires, octubre 30 (Agencia NAN-2009).-La inmigración en Argentina no es un fenómeno que se acota sólo al siglo XIX y XX. Año tras año, muchos extranjeros llegan a este país en busca de mejores horizontes que, aún después de años de modelos económicos y culturales excluyentes, Buenos Aires sigue ofreciendo. Así como aquellos viejos italianos, españoles y franceses, los inmigrantes del siglo XXI llegan para ofrecer otras lecturas y vivencias de nuestro quehacer argentino y latinoamericano.

Tal es el caso de Thomas Dassance, proveniente de un “pueblito chico” de Francia, que mientras se preparaba para su doctorado en Historia sobre la inmigración francesa en Argentina llegó a La Plata y se quedó. Desde muy pequeño conoció la historieta argentina de la mano de Alberto Breccia con Perramus, y según admite, fue uno de esos impactos que difícilmente se olvidan. Quizá por eso no duda en jurar que cada vez que lo relee “es como volver a las fuentes”.

Actualmente, él es uno de los principales editores de Suda Mery K!, revista de historietas latinoamericanas que, con cuatro años de historia y cinco libros editados, continúa siendo la única propuesta integral que intenta romper el aislamiento editorial y dar a conocer a los dibujantes y guionistas del continente al resto del mundo.

Todo comenzó cuando Thomas llegó al país y se encontró con que el mercado argentino era escaso en materia de cómics e historietas. Algo había pasado en el medio para que la puerta abierta por la época dorada de los dibujantes como Breccia, Germán Oesterheld, Quino, Hugo Pratt, Dino Battaglia y tantos otros, se haya cerrado. O mejor dicho, la hayan cerrado. Eran los sesenta y la televisión comenzaba a instalarse en Argentina. Y los militares que, en un principio, no habían prestado atención al formato en viñetas, después comprendieron que se trataba de la trinchera por excelencia de escritores y dibujantes críticos y, entonces, arremetieron contra ella y sus creadores. Muchos fueron secuestrados y otros tantos obligados al exilio.

Es por ese vaciamiento que surgió la idea de Thomas de armar una sociedad sin fines de lucro con la intención de promocionar y difundir los jóvenes autores argentinos en Francia, y establecer un puente con Argentina. Hoy, la asociación ya tiene nombre: Exabrupto, nexo entre ambos países que pretende revertir lo que, según Dassance advierte, pasó durante los noventa: “En los que nadie supo nada de la historieta argentina”.

Con la creación de la asociación, Dassance llegó al Festival de La Paz 2004, en Bolivia, donde a diferencia de los festivales que se organizaban en Buenos Aires respiró un aire “de amor y respeto hacia la historieta”; y donde había un intento muy fuerte de integración entre las diferentes culturas. Ahí se prendió la llama. “En Argentina, hasta entonces, había muchas `relaciones carnales con Estados Unidos´ traducidas a las historietas. Todos los chicos intentaban dibujar superhéroes, grosos, muy a la norteamericana, y, en cierto modo, olvidando sus propias raíces. Por suerte, en el 2000 se rompió esa burbuja, pero el saldo fue toda una generación moldeada a los gustos de Estados Unidos y una tradición Latinoamericana coartada”.

En aquel encuentro paceño, Thomas y otros dibujantes se convencieron de que había que establecer una conexión real entre los historietistas del continente, ya que, hasta entonces, era más fácil acceder a cómics norteamericanos o manga japonés que saber qué era lo que pasaba con las viñetas en Chile o en Bolivia. Entonces, comandada por Dassance desde Argentina, Carlos Reyes desde Chile y Frank Arbelo --cubano radicado en La Paz y director de la primera revista de historietas en su país, La Crash -- desde Bolivia, nació Suda Mery K!.

“Decidimos unir fuerzas y potenciarnos en nuestros respectivos países para armar una revista latinoamericana donde, justamente, se vea plasmada la unidad de dialéctos y geográfias, y las diferencias culturales de cada país; escapando al molde de aventura o de superhéroe, que no es la realidad de éste amplio territorio”, agregó Dassance, mientras ceba mates a Agencia NAN y su hijo franco-argentino corretea como el rey de la casa mientras mezcla palabras y los idiomas.

Tres son los objetivos de estas tres personas amantes de la historieta. Tres objetivos para nada fáciles y, teniendo en cuenta las dificultades económicas en sus territorios, todo un logro que durante 2009 estén por lanzar la sexta edición de la revista, proyecto ambicioso que nace de las entrañas de la rebeldía misma, como la historieta lo demanda. Los objetivos: romper límites y limitaciones geográficas, ya que “a través de las fronteras no se filtra la cultura de la historieta” y dar a conocer a todos los historietistas para posibilitar un intercambio; quebrar limitaciones históricas, porque en algún momento se fragmentó la tradición e impidió que los jóvenes se conectaran con su cultura; y vencer la limitación económica, convocando a autores extranjeros que no sean taquilleros, y que a través de su recorrido independiente sirvan de guía, de inspiración y de apertura para las jóvenes generaciones de América Latina.

A pesar de algunos intentos por rescatar la tradición de la hisorieta argentina --recordemos que el diario Página/12 reeditó las grandes obras de guionistas y dibujantes como Oesterheld, Breccia y Solano López-- , aún falta “aceitar” esas relaciones con el mundo de la historieta. Entonces, Dassance, emprendió una inciativa más. Junto a nueve guionistas, diseñadores y dibujantes como Salvador Sanz, Javier Supa, Hernán Ciriani, entre otros, decidieron crear el Festival Internacional de Historieta Viñetas Sueltas que en su segunda edición, en mayo, contó con cuarenta invitados internacionales.

Una propuesta más que interesante que va a “contramano” de lo que se hizo durante la década de 1990 y principios del 2000, ya que, en primera instancia, quienes lo organizan son personas que están estrechamente ligadas al mundo del humor gráfico, los cómics y las historietas. “La tercera edición está complicada porque el año que viene es el Bicentenario y el Mundial de Fútbol. ¿Qué lugar le darán a la historieta?”, ironizó Dassance.

Con la intención de ampliar el mundo de la historieta y acercarla a un público más abierto y diverso. Con la finalidad de recuperar aquella tradición coartada por el genocidio cultural de las dictaduras militares y poner las viñetas en contacto con otras artes. Es que este francés, que habla a la perfección un castellano con modismos argentinos, llegó a Argentina con el mismo sueño de aquellos viejos inmigrantes: trazar puentes entre ambos continentes para fomentar y recuperar, de una vez por todas, la unión latinoamericana en el campo del arte.

Sabe, también, que en momentos como estos quizás la historieta no recupere su popularidad en términos de masividad, pero lucha cotidianamente porque ésta siga siendo un medio popular y, sobre todo, que continúe cautivando a viejos y nuevos lectores. Como dijo un invitado belga en el último encuentro de Viñetas Sueltas: “La historieta es todo lo que es historieta”; y quizás también un poco más.