martes, 3 de mayo de 2011

Discos: “Rock no es moda” (VidaFuego, 2011).-

El primer disco del compositor neuquino es una bomba rompeportones: una mezcla de pizcas de punk, post punk, electrónica y manifiesto anarquista que shockea al oyente desde el primer estruendo.

Por Guillermina Watkins

Neuquén, mayo 2 (Agencia NAN-2011).- “Me gusta el faso, la paz en el mundo. Soy anarquista sí, artista, cada vez menos”, confiesa Stimpy Rokk. Su álter-ego musical es VidaFuego, un proyecto con el que gira desde hace más de tres años por las escenas neuquina y porteña. Con la llegada de su primer disco, no se sabe quién es más peligroso: si Stimpy o su otro yo que, como Frankestein, amenaza con sublevarse y convertirse en un fiel reflejo del punk rock más ácido, matizado con toques de hard rock, indie, house y pop, para evitar convertirse “en lo que la escena musical de Capital, alternativa y pintoresca, ordena”.

El disco es una bomba cuya combinación letal, una dosis de punk, post punk, electrónica y una pizca de discurso anarquista que dura 15 temas (dos de ellos están escondidos) delinea el manifiesto Stympeano. La obra completa está sostenida por samples de Sex Pistols, NOFX, Flema, Fun People, Iggy Pop; maestros a los que él agradece “por haberle marcado el camino”.

Letras poderosas, acordes rockeros, synthes y bases electrónicas suben, suben y siguen subiendo hasta atrapar al oyente que, después de la primera canción, no podrá dejar de escuchar el resto. Rock no es moda se convierte en un vicio. Lo que narra (o canta) es lo que todos dicen o al menos piensan: la juventud –y también la adultez- es un arma de denuncia ante la injusticia social.

Stimpy es el dealer de la bomba sonora que empieza con un manifiesto “Punkbeat” en contra del poder institucionalizado, tanto de la izquierda como de la derecha; promulga un “No Herir”, que desafía los valores católicos al insistir en “quemar una biblia para calentar al pobre, cuidar al niño para no herir al hombre”; rememora con un mix de “Metamorfosis Adolescente”, temazo de Flema y un himno de la adolescencia de principios de los noventa; invita a revelarse y recordar a los desaparecidos con “Auto-Stima del 77”; y también a la fiesta y al ocio con “Perder el tiempo”, “I,E,A”, “Celebración”, “Seguimos de..”, y otros.

De esta forma, Stimpy convierte su engrudo punk en eso, un mejunje donde también aparecen sus otros yo del pasado: canciones más “románticas” y guitarreras de su etapa de Suerte y algunos rockitos greenvegetarianrockandroll de su época de The Lucha Sin Armas, gran banda punk que fue soporte de Fun People en Cemento, entre otras.

Espiritualmente, Rock no es moda es el disco de un flaneur que pinta un mundo que no sólo perdió gravedad, sino también a su propio eje; un sistema donde a pesar de que las convenciones se derrumban, se trasviste en nuevas formas de dominación. Pero ese mundo también contiene a Stimpy -y deberíamos solicitar que sea “Un Stimpy, muchos Stimpys”- para erguirse con la voz en alto, la guitarra al frente, y nombrar los millones de motivos que existen para rebelarse. Como buenos anarquistas expropiadores, quizás escuchar esta bomba musical sólo sea el comienzo.

http://www.myspace.com/vidafuego
http://www.mediafire.com/?pc72ruw212j7764

No hay comentarios: